Fallece un jubilado de una firma vasca de cromados que no le protegió
La sentencia sitúa este producto entre las enfermedades laborales peligrosas
El mapa de las enfermedades laborales es posible que esté cada vez más controlado, pero también es cada día, mayor y más dramático. La ausencia de medidas de protección durante décadas en muchas empresas, pequeñas, grandes y medianas, públicas y privadas, está haciendo que afloren cada vez más casos de patologías asociadas a productos cancerígenos que se han usado de forma masiva. En la mayoría de las ocasiones esos productos se convierten en mortales precisamente cuando se trata de disfrutar de los últimos años de vida, en la jubilación o a punto de lograrla, después de esperar aletargados en el organismo durante décadas.
Una sentencia del juzgado número dos de lo social de San Sebastián condena a una empresa de zincados a indemnizar, como responsable, a los familiares de un trabajador que después de 40 años de servicio en dos empresas, y tras su jubilación, en 2003, desarrolló un cáncer por el que falleció. En Euskadi han existido y todavía hay numerosas firmas de tratamientos de cromo zinc y niquel que, como la del trabajador afectado, no ofrecían a sus empleados ningún tipo de protección. “En las instalaciones de la empresa no existían aspiraciones, la ventilación del local son tres ventiladores a la calle de la fachada y un ventilador en la fachada paralela. No se proporcionaban mascarillas a los trabajadores y para protegerse en ocasiones utilizaban un pañuelo sobre la nariz y la boca”, cita la sentencia. El trabajador enfermó en marzo de 2011 y el cáncer se lo llevó en apenas once meses. Seguir Leyendo
Fuente: El Pais