En el último borrador del RD, las mutuas pierden el control, que mantiene la inspección
Tras reunirse nuevamente con representantes del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS), Francisco José Sáez, que actuó como portavoz del Foro de Atención Primaria en la materia, explicó a esta publicación que el último borrador del anteproyecto de real decreto que regula la gestión y el control de los procesos de incapacidad temporal (IT) recoge algunas de las propuestas de los profesionales, un proceso largo en el que “pasito a pasito”, todas las partes van acercando posturas. De hecho, la intención del Ministerio de Empleo es que el proceso concluya en 2014, por lo que volverá a reunirse con los facultativos de AP, probablemente durante los primeros días de diciembre.
El éxito fundamental que destacó Sanz es que las mutuas no asuman el control de las bajas y, por tanto, no puedan acceder a la historia clínica de los pacientes —sólo a los informes de inspección y seguimiento a través del INSS—, algo que se encontraba recogido en los borradores anteriores y preocupaba especialmente al foro, pues consideraban que podía suponer una pérdida de seguridad de los datos al encontrarse recogidos todos, y no sólo los relacionados con esa IT en particular.
Sin embargo, no se ha alcanzado todavía un acuerdo sobre el silencia administrativo, pues con la redacción actual, cuando la mutua considere que el trabajador puede desempeñar su labor, dirigirá su petición de alta a la inspección, y el silencio administrativo durante cinco días naturales supondrá el alta del mismo. Los profesionales no creen que los plazos estén ajustados a la realidad, ya que en esos días la mutua tiene que comunicar a la inspección médica que el paciente está de alta a efectos económicos, la inspección que informar al médico y éste al paciente, que puede recurrir el alta si no está de acuerdo, algo que, a juicio de Sanz, podrá provocar que, ante la duda, se pronuncien siempre de manera negativa si no tienen tiempo a evaluar correctamente al trabajador de baja realizándole las pruebas médicas precisas o en caso de estar a la espera de algunos resultados. Augura, eso sí, que no llegará a la redacción definitiva del Real Decreto ya que en cada borrador, las mutuas “van perdiendo poder”, por lo que espera que esta medida tampoco llegue a ratificarse.