El Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo, en Salamanca, desea iniciar los trámites necesarios para la declaración de Patrimonio Cultural Inmaterial, de la metodología constructiva que se utiliza, para levantar la principal infraestructura que se instala en esta localidad, con motivo de la celebración de sus fiestas grandes, el coso taurino del Carnaval del Toro.
Desde ya hace unos años, han surgido voces pidiendo que se aumenten las medidas de seguridad y se profesionalice la construcción, al observarse riesgos graves (especialmente, la caída en altura) al construirse las gradas, denominadas en este caso “tablaos”.
Si bien, tanto políticos como técnicos del Consistorio apoyaron esta petición inicialmente, en la actualidad, movilizada por algunos intereses, está derivando hacia la perpetuidad de la “supuesta” tradición, de ser construida por los vecinos de la localidad; “supuesta”, porque siempre participaron en buena parte, empresas de construcción que lo siguen haciendo, aunque últimamente, se ven abocadas a negarlo para que no se les impida la participación.
A pesar de que la Ley 32/2006, que regula la subcontratación en el sector de la construcción, exige que las obras de construcción sean ejecutadas por profesionales, el Ayuntamiento mirobrigense no asume su aplicación, pidiendo que se aluda a una relación de familiaridad o amistad entre los constructores, para evitar la legislación laboral. Esto deriva en la aplicación arbitraria de medidas de seguridad que resultan claramente insuficientes, frente a las que merece su dificultad objetiva.
Entre las deficiencias observadas en la construcción que se ha realizado este pasado fin de semana, se observan: la utilización de equipos de trabajo en altura que no cumplen con lo establecido en el Real Decreto 2177/2004; ausencia de protecciones individuales o colectivas anticaidas en suelos elevados, en pendientes muy pronunciadas; ausencia parcial de cascos y chalecos de alta visibilidad en presencia de vehículos y cargas suspendidas; no formalización de la coordinación entre los diversos equipos de trabajo concurrentes; falta de perimetración en la obra, con destacada presencia de personas ajenas a los trabajos, entre otras…
La Guía Técnica para la evaluación y prevención de los riesgos relativos a las obras de construcción del INSHT, incluye en el apartado d) del Anexo I, el montaje y desmontaje de plazas de toros conformadas por elementos prefabricados y que utilizan tecnologías propias de la industria de la construcción, por ese motivo, se considera que la construcción de este coso taurino debe contemplar lo establecido en el Real Decreto 1627/1997, que establece las disposiciones mínimas de seguridad y salud en las obras de construcción. Se ha informado al Consistorio de ello, pero ha hecho caso omiso.
A la espera de que las instituciones a las que se les ha remitido el problema, actúen definitivamente para evitarlo, existen varias iniciativas altruistas para procurar la seguridad de estos constructores:
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Se solicita el apoyo del sector para evitar esta negligencia, que está dañando seriamente, la cultura preventiva de la zona.