La información fue obtenida de quien mejor conoce el oficio, “las rederas”, ellas indicaron sus problemas más frecuentes, la descripción de las tareas que desempeñan según el tipo de aparejo que trabajan, la organización del trabajo, etc. Quedando para los profesionales de la medicina del trabajo el análisis de los riesgos en su acti- vidad laboral, la identificación y diagnóstico de las patologías y el establecimiento de la relación o asociación cau- sal entre ambos. Las más frecuentes fueron los trastornos músculo-esqueléticos (TME) cuyo origen está en la carga física asociada al trabajo, a la que se suman las condiciones de trabajo (frío, calor): movimientos repetitivos, posturas forzadas y mantenidas en el tiempo, manipulación de cargas y aplicación de fuerzas.