
María Luisa González, portavoz de la Asociación de Médicos del Trabajo en Castilla-La Mancha, lamenta los últimos acontecimientos que se están dando en la agenda del Ministerio de Sanidad. La Dra. Gonzalez señala que en estos momentos tienen dos frentes “legislativos” que les hacen «temer por el futuro».
Por un lado, el Real Decreto que están negociando los ministerios de Sanidad y Política Social y el de Trabajo y Asuntos Sociales, por el que podrían perder su puesto actual hasta el 50 por ciento de los médicos del trabajo y lo que les mantiene más preocupados, esto es, que el documento permitirá que otros profesionales de la salud -no especialistas- sean los que ofrezcan esta asistencia limitando la consulta con el médico del trabajo sólo a patologías o accidentes directamente relacionados con el trabajo y el puesto de cada persona.
Aparte de esto, la Asociación de Médicos del Trabajo ve en la futura Ley de Salud Pública una amenaza, ya que «habla de la Medicina del Trabajo pero no aborda cómo integrarla con el resto del Sistema Nacional de Salud, es decir, que tanto el médico de atención primaria, como el especialista y el médico del trabajo vean todos el historial completo del paciente, las pruebas hechas y medicamentos recetados, algo que ahora no consta pues las pruebas y los reconocimientos médicos en el trabajo no llegan a Primaria y viceversa, con la consiguiente duplicidad de pruebas y gastos».
En Toledo -al igual que en el resto de provincias españolas- estas medidas afectarán a todos los servicios de prevención que en los últimos tiempos han contado con problemas para cubrir estas plazas, ya que había pocos especialistas. «Ahora se abre la puerta para que estas vacantes se ocupen por facultativos no especializados en esta materia, lo que repercutirá en la calidad del servicio». A nivel general se muestran más intranquilos porque todas estas normativas, recuerdan, «dan pie a que el empresario pueda contratar a otro médico que no sea especialista y que no trabajará todos sus conceptos como cualquier otro profesional en ginecología o traumatología». Prevención, asistencia, rehabilitación, incorporación al trabajo y peritaje «no se desarrollarán al cien por cien como sería deseable». Para todos los residentes que se encuentran en formación en las mutuas, ahora «la especialidad dejará de ser atractiva». «El futuro se presenta complicado».
Para finalizar, incide en el papel que estos facultativos desempeñan en las empresas, como ahorrador de costes y tiempo de sus trabajadores, como figura que vela por la salud de las plantillas y como conocedores de sus situaciones personales y laborales y sus patologías.
No pasan por alto, además, que España «es el país de la Unión Europea con más accidentes laborales». A nivel nacional, la asociación agrupa a 2.000 profesionales y en Castilla-La Mancha son unos 370.
Esta información nos ha llegado a través de un e-mail de un compañero medico del trabajo preocupado por su futuro, desconocemos su fuente original.