El Juzgado de lo Penal número 2 de Zaragoza ha absuelto a un empresario que se enfrentaba a casi cuatro años de prisión y al pago de 271.000 euros por el accidente laboral de un trabajador. El magistrado entiende que la víctima es la responsable de su caída desde más de siete metros porque no tomó precauciones, pese a su experiencia.
Un trabajador demandó a su jefe tras caer de una altura de siete metros y medio mientras limpiaba una nave. Pedía casi cuatro años de prisión y el pago de 271.000 euros a raíz de su incapacidad laboral por este accidente laboral, pero el Juzgado de lo Penal número 2 de Zaragoza ha decidido absolverle.
El magistrado entiende que el procesado, Carlos Enrique G.F. no incurrió en ninguno de los dos delitos que le acusaban: contra el derecho de los trabajadores y uno de lesiones por imprudencia grave. También se acusaba de los mismos delitos a Carlos B.G., quien contrató los servicios del anterior. Noticia completa
Fuente: Aragondigital