Si eres de los que se ponen de mal humor y se indigna al escuchar villancicos navideños antes que inicie diciembre, esto no necesariamente significa que seas un “Grinch” que odia la Navidad.
Resulta que escuchar este tipo de música mucho antes de las fiestas de fin de año, supone una carga psicológica según la psicóloga británica Linda Blair, ya que las típicas canciones de temporada hacen que las personas piensen en esa época y en los quehaceres que ella conlleva: cenas, viajes, invitaciones, regalos y gastos extra, lo que incrementa los niveles de estrés.
Quien trabaja en un centro comercial debe soportar horas de música navideña repetitiva que cobra su precio a nivel psicológico. En muchos casos contribuye a padecimientos de estrés o depresión
Durante una entrevista con el sitio Sky News, la experta indicó que determinados puestos de trabajo están más expuestos a este problema, siendo más perjudicadas las personas que trabajan en los centros comerciales.
Blair coincide con los resultados de una encuesta realizada por el Tampa Bay Times sobre establecimientos que comienzan a poner villancicos a mediados de octubre: Que siempre sean las mismas canciones y que sean repetitivas no ayuda a desconectarse de estas fiestas que resultan ser muy estresantes para algunos.