El estudio, publicado en la revista Circulation, analizó los corazones de adultos de 45 a 64 años sin historial de ejercicio regular. Los pacientes se dividieron en dos grupos, uno que participó en el entrenamiento de yoga, equilibrio y fuerza, y otro que se centró en el ejercicio aeróbico.
Después de dos años, el grupo aeróbico experimentó una mejora del 18% en la ingesta máxima de oxígeno durante el ejercicio y una mejora del 25% en la “plasticidad” del músculo ventricular izquierdo del corazón. Ambos son signos de un corazón más saludable, informa BBC News.
La gran conclusión es que los investigadores piensan que el ejercicio debe ser parte de la rutina de todos, el investigador principal del grupo dice que su importancia es similar al cepillado de dientes. E incluso si has llevado una vida sedentaria hasta este punto, todavía hay una oportunidad para ayudar a corregirlo.