Moderador:
Javier Sanz González. Especialista en Medicina del Trabajo. Director. IMP Instituto de Medicina Predictiva. Jefe del servicio de Medicina del Trabajo y Prevención de Riesgos Laborales. Deloitte España.
La medicina del trabajo actual necesita un impulso renovador para conseguir el paso del siglo XX al siglo XXI. Es continuo el empleo de la medicina predictiva, de precisión en múltiples escenarios como en el de la cardiología, la oncología o la psiquiatría entre otros pero sin embargo en nuestro entorno se habla continuamente de la evaluación de riesgos individualizada pero no se vislumbra en el corto tiempo una auténtica medicina del trabajo predictiva. La actividad desarrollada en el seno de los servicios de prevención, especialmente los ajenos, está totalmente alejada de la moderna medicina. Es necesario la generación de sinergias entre la medicina ejercida en el seno de las empresas con los conocimientos que nos aportan biotecnólogos, biólogos moleculares, bioquímicos… De ellos debe derivarse nuevas áreas de conocimiento en nuestra especialidad como la toxicogenómica, la medicina del trabajo predictiva orientada a una predicción e individualización de la prevención en función de las características únicas de cada individuo o la generación de valores límite ambiente dinámicos en función de la singularidad genética de cada trabajador.
Todo lo anterior debidamente gestionado va a ser de ayuda capital en la prevención de enfermedades como el cáncer profesional o en el conocimiento de la edad funcional.
Proyectos internacionales como la valoración de las diversas exposiciones dañinas a la persona a lo largo de su vida, junto a la objetivación de la edad cromosómica y la aplicación de esos conocimientos al mundo de la salud laboral es el motivo del desarrollo de esta mesa