La presente publicación se realiza con el objetivo de divulgar la información sobre riesgos laborales derivados de formación de atmósferas explosivas por polvo combustible y las medidas de prevención que se deben adoptar en el ámbito de los obradores pertenecientes al sector alimentario, entendiendo como tales aquellas instalaciones donde se realizan actividades de producción y transformación, artesana o industrial, del pan y sus derivados, y de los productos de pastelería y repostería.
No obstante, también podría ser aplicable, o al menos servir de base, a las instalaciones donde se realicen actividades que por sus características propias pudieran considerarse similares a las mencionadas en el apartado anterior, tales como en la fabricación de helados, piensos, etc.
Esta monografía se centra principalmente en el conjunto de procesos de elaboración del pan, pastelería y repostería y más concretamente durante la fase más crítica desde el punto de vista de la formación de atmósferas explosivas por polvo combustible, es decir, en la fase que comprende, esencialmente, el trabajo mecánico de transformación de las materias primas en masa de pan o pastelería (amasamiento o amasadura, división, formación de barras…), tanto si se realiza manualmente como si se efectúa con la ayuda de aparatos mecánicos (amasadoras, formadoras, divisoras, pesadoras, etc.). Estos procesos de elaboración pueden desarrollarse en locales o establecimientos diferentes.
En este contexto, el Real Decreto 681/2003, plenamente en vigor en la actualidad, regula la prevención y protección de los trabajadores por exposición al riesgo de explosión, que tiene su origen en la formación de atmósferas explosivas en el lugar de trabajo, estableciendo así una serie de obligaciones del empresario con objeto de prevenir las explosiones y de proteger a los trabajadores contra éstas, mediante la adopción de soluciones técnicas y/u organizativas para eliminar o minimizar dicho riesgo, que se revisarán periódicamente y siempre que se produzcan cambios significativos, siguiendo un orden de prioridades, conforme a los siguientes principios básicos:
– Impedir la formación de atmósferas explosivas o, cuando la naturaleza de la actividad no lo permita.
– Evitar la ignición de atmósferas explosivas y atenuar los efectos perjudiciales de una explosión.
– Cuando sea necesario, se completarán o combinarán con medidas contra la propagación de las explosiones.
Por último, se hace necesario indicar que la elaboración de este documento pretende servir de herramienta útil de aplicación, aportando las aclaraciones y explicaciones necesarias en los riesgos y medidas preventivas más relevantes, y recoge los conocimientos precisos para la intervención en prevención de los riesgos laborales asociados a los riesgos de explosión por polvo combustible en lugares de trabajo propios de obradores y similares, dependiendo claro está del tipo de sustancia empleada.
Fuente: IRSST