Una de las claves para lograr el mayor nivel de productividad posible en cualquier empresa es que los empleados se sientan a gusto en su puesto de trabajo. El bienestar laboral a menudo viene determinado por numerosos factores, entre los que suelen destacarse las condiciones laborales, un trato correcto con los superiores o el clima laboral generado por la relación con los compañeros. No obstante, impulsar una alimentación adecuada en el puesto de trabajo, y tener en cuenta la seguridad alimentaria, también afectará positivamente al rendimiento del trabajador. Por eso, la seguridad laboral debe tener en cuenta la alimentación: ha de difundir información, facilitar opciones más saludables y asegurarse de que se siguen los procesos oportunos, como el uso de los desinfectantes alimentarios adecuados, a la hora de preparar los menús de la empresa.
La importancia de la alimentación en el sector laboral
En la actualidad, existen diversos estudios que han detectado vínculos entre los índices de masa corporal elevados en los trabajadores y un descenso de productividad en las empresas. De hecho, la Red Europea para la Promoción de la Salud en el Trabajo señala que invertir un euro en salud puede llegar a brindar beneficios que oscilan entre los 2,5 y los 4,8 euros. Entre otras razones, aseguran, esto es debido a que reduce el absentismo laboral. Por eso, cuidar la alimentación de los empleados es tan importante, especialmente para el sector de la alimentación. De hecho, muchas compañías ya toman todo tipo de iniciativas saludables que van destinadas a su propia plantilla.
La prevención no es suficiente
Aunque la seguridad laboral debe velar por evitar accidentes laborales y otros problemas relacionados, también es fundamental que introduzca conceptos como la promoción de hábitos saludables, muchos de los cuales estarán relacionados con la seguridad alimentaria.
Una alimentación saludable es un hábito que puede mejorar la calidad de vida y que adquiere una nueva dimensión en el lugar de trabajo. Por eso, cada vez son más las empresas que incluyen medidas destinadas a ofrecer toda la información posible a su plantilla, pero también a influir positivamente en las conductas alimentarias y en sus habilidades al respecto.
Así, en lo que a alimentación se refiere, se procurará difundir toda la información posible. Además, el comedor de la empresa debe facilitar opciones más saludables, lo que puede lograrse introduciendo fruta a precio reducido o sustituyendo la bollería industrial, que suele estar disponible en las máquinas expendedoras, por otros productos que sean más sanos. Por supuesto, los menús de empresa que se ofrezcan deben ser variados y equilibrados. En lo que respecta a la cocina, el personal debe tomar medidas de seguridad e higiene adecuadas. Así, la materia prima ha de ser desinfectada y manipulada de forma correcta en todo momento.
La seguridad alimentaria también pasa por evitar problemas de salud que puedan ser producidos por alergias e intolerancias. De este modo, aquellas empresas que ofrecen menús a sus empleados deberían incluir opciones libres de gluten o de lactosa, por ejemplo. Asimismo, alergias a productos como el huevo o los frutos secos serán tenidas en cuenta y, si un empleado la padece, su comida debe ser preparada aparte.
La importancia de la seguridad alimentaria
El concepto de seguridad alimentaria se sostiene en tres pilares principales: la disponibilidad de los alimentos, el acceso a ellos y un consumo que sea adecuado a nivel nutricional. Esto es lo que permite a las personas tener cubiertas sus necesidades para que puedan realizar sus actividades de forma activa. Es por eso que este factor se erige como piedra angular para el correcto funcionamiento de cualquier compañía. Cuando la empresa integra la salud y la alimentación en el bienestar laboral, genera un impacto positivo sensible, mejora la calidad de vida de sus empleados y optimiza, a su vez, su productividad.