
Gregorio Varela Moreiras, catedrático de Nutrición y Bromatología de la Universidad CEU San Pablo de Madrid, y presidente de la Fundación Española de Nutrición, ha coordinado lo que pretende ser una especie de hoja de ruta para atajar el problema.
El documento, Obesidad y sedentarismo en el siglo XXI: ¿qué se puede y se debe hacer?, en el que han participado más de 30 expertos españoles de distintos ámbitos de la salud, propone una serie de medidas clave para combatir uno de los grandes males del siglo XXI y establece qué es lo que se puede y se debe hacer. Además, también hace una radiografía de los escollos existentes en esta lucha. De cara al futuro, los especialistas firmantes reclaman que la prevención del sobrepeso y el sedentarismo “se incluyan en la cartera de servicios” del Sistema Nacional de Salud, así como la potenciación de un abordaje multidisciplinar del problema, algo que ya se hace en las todavía muy escasas unidades específicas con las que cuentan algunos centros. “Hay una falta alarmante” de esta herramienta, ha subrayado Varela. En esta línea, también ha pedido que los datos de actividad física se incluyan en los sistemas de monitorización de la salud.
Está demostrado que la obesidad no es un problema único, ha señalado el experto en Nutrición, sino que tiene múltiples caras, por lo que ha de tenderse -y cada vez hay más técnicas que lo permiten- hacia los tratamientos personalizados e individualizados. El documento también propone la necesidad de coordinar las distintas estrategias ‘anti-obesidad’ iniciadas desde diferentes ámbitos y hace especial hincapié en “la necesidad de monitorizar sus resultados” a largo plazo, algo que ya están haciendo países como Francia.
Pero, tan importante como los esfuerzos colectivos contra la obesidad son las medidas que puede hacer el propio individuo o su núcleo familiar, ha señalado el especialista. “Tenemos que favorecer la autonomía, la responsabilidad individual a nivel de dieta y actividad física. A veces queremos dejarlo todo en manos de otros, pero hay que reclamar la autonomía”.
Via: El Mundo