La nueva Estrategia se está elaborando sobre la base del consenso, siendo sus principales objetivos: (i) Mejorar la efectividad de las actuaciones de las Administraciones Públicas en materia de prevención de riesgos laborales, (ii) Impulsar la coordinación entre Administraciones Públicas, (iii) Potenciar actuaciones relacionadas con el análisis, investigación, promoción, apoyo y control, formación y asesoramiento en prevención a la empresa, (iv) Potenciar las actuaciones en relación con determinados colectivos, sectores o riesgos: PYMEs, TME ( trastornos músculo-esqueléticos), seguridad vial, laboral, etc., y (v) Fortalecer el papel de los interlocutores sociales en la mejora de la Salud y Seguridad en el Trabajo.
La finalidad de la nueva Estrategia no es otra que mantener, complementar y reforzar, de forma activa, todos los programas o medidas para conseguir crear una verdadera conciencia social que ponga de manifiesto la importancia del cumplimiento de las normas preventivas y las graves consecuencias que pueden derivarse de su incumplimiento.
El compromiso y la participación de la sociedad en su conjunto son fundamentales para consolidar la cultura preventiva, si bien, desde los poderes públicos se deben instaurar los mecanismos necesarios para concienciar a la sociedad e integrar la idea de la prevención en el día a día de la rutina laboral, y la nueva Estrategia Española de Seguridad y Salud en el Trabajo 2014-2020 es clave para ello. Se debe hacer llegar al conjunto de la población la idea de que la prevención es inherente al trabajo y que el trabajo no se concibe sin prevención.