Debido a la creciente presión social y pública, así como al aumento de las expectativas de los consumidores, se espera cada vez más que las empresas no sólo cumplan con las obligaciones legales sino que “vayan más allá de la exigencia legal” a través de una actuación responsable. Una de las maneras en que las empresas pueden cumplir con estas crecientes expectativas es creando lugares de trabajo que son saludables para sus trabajadores y que previenen enfermedades y dolencias causadas por el trabajo, al mismo tiempo que mejoran la productividad y la competitividad.A pesar de que existen numerosas herramientas para su uso en el ámbito empresarial, la mayoría se centran en riesgos laborales específicos, industrias o sectores concretos pero no existe ningún plan integral de buenas prácticas. Con el fin de proporcionar a las empresas este tipo de plan, la Organización Mundial de la Salud (OMS), basándose en el Plan Global de Acción de Salud en el Trabajo, 2008-2017, lanza el Marco Global de Lugares de Trabajo Saludables en Abril de 2010. Se trata de recopilar un conjunto de buenas prácticas y herramientas adecuadas que se ajusten al Marco de la OMS de Lugares de Trabajo Saludables para su aplicación práctica.
Claves:
1.- Participación y Compromiso de la Dirección
2.- Involucrar a los trabajadores y a sus representantes
3.- Ética y Legalidad Empresarial
4.- Uso de un proceso sistemático e integral para asegurar la mejora continua y la eficacia
5.- Sostenibilidad e Integración