Si bien es lo habitual, no todos los cambios culturales en materia de Prevención de Riesgos Laborales requieren de largos periodos de adaptación. Existen 3 estrategias sencillas que ayudarán a impulsar a tu empresa hacia una cultura de seguridad :
- No matar a los mensajeros: Es habitual rechazar a aquellos empleados que informan y alertan acerca de los problemas de seguridad y salud a la dirección línea de mando. Esta forma de actuar únicamente generará conductas de silencio y encubrimiento en materia de PRL. Nuestro verdadero enemigo debe ser la causa de los riesgos, y no los empleados que los denuncian . La única forma de de gestionar la seguridad y salud es favorecer la proactividad, mediante la creación de un ambiente seguro de trabajo y de confianza donde los empleados puedan denunciar sin temor los problemas de seguridad.
- Huir de soluciones simples: Los accidentes, especialmente los graves, crean por la judicialización existente la necesidad de buscar responsables, y esto únicamente favorece la tendencia natural de buscar causas únicas a los errores. Las investigaciones de los accidentes tienen que evitar la tentación de simplificar en exceso estos accidentes y valorar el hecho de que son muchos los factores que coinciden para generar un accidente.
- Aprender de los errores: Cada accidente e incidente es una oportunidad de mejora. Es esencial que les empresas y organizaciones aprovechen el conocimiento que cada accidente e incidente proporciona y además de extender las medidas preventivas aprendidas a toda su organización, también lo compartan con terceros.
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