
Tres aparejadores del Ayuntamiento de Ferrol han sido imputados por un posible delito contra la seguridad y la salud de los trabajadores por las obras de reforma del cuartel Sánchez Aguilera, habiendo sido citados a declarar por su responsabilidad en la ejecución de dichas obras, sin plan de seguridad. No hay ningún cargo político de la corporación ferrolana figura en la instrucción del caso.
Aunque el Ayuntamiento ferrolano planteó la reforma como una obra menor que no requería plan de seguridad, la Inspección de Trabajo no lo entiende así enumerando en su informe diversas infracciones, y señalando que la Administración local, como “promotor y contratista”, no figura en el registro de empresas autorizadas para manipular amianto.
Durante el desarrollo de la reforma los operarios contratados por el municipio se subieron al tejado del viejo cuartel sin sujeción, red o barandillas para reformar cubierta y fachada. Retiraron a mano viejas placas de uralita que lavaron y cortaron a medida con una sierra radial sin protección individual. Al parecer tampoco se realizaron los reconocimientos de vigilancia de salud ni formación en prevención.
Via: ElPais.com