A dos jóvenes de la ciudad de Ontinyent no se les ocurrió otra idea que subirse a una de las grúas de construcción que se encuentra al lado del antiguo edificio del hotel Pou Clar. Los chicos escalaron hasta la parte más alta de la misma y empezaron a caminar como si de equilibristas se tratarán, sin ser conscientes del peligro que podía entrañar.
Algunas personas que se encontraban en la zona les avistaron y llamaron a la policía, que se personaron en el lugar de los hechos.
Dicho elemento que se emplea para la construcción de edificios lleva instalado en la zona desde hace tiempo, como muchas otras que han quedado tras la paralización de obras debido a la crisis.