
La Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (Fenin), en colaboración con la Sociedad Española de Electromedicina e Ingeniería Clínica (Seeic), ha publicado el informe ‘Gestión de riesgos biológicos asociados al mantenimiento de productos sanitarios activos no implantables’, en el que ha incluido una guía para la prevención de estas situaciones. Con esta iniciativa, ambas entidades pretenden ayudar a los responsables de los centros sanitarios a asegurar unos procesos de mantenimiento y manipulación adecuados a la tecnología y para definir las normas y procedimientos de seguridad para los usuarios y mantener la calidad diagnóstica que se establece en la legislación.
Según ha resaltado Fenin en un comunicado, la prevención de contaminación por riesgos biológicos debe ser contemplada en todas las etapas del ciclo de uso de los productos sanitarios activos no implantables (Psani) y establecerse un protocolo de actuación para las organizaciones sanitarias que considere todos los procesos de transporte, manipulación y asistencia técnica de los mismos.
El principio básico de actuación es que cualquier fluido corporal debe considerarse como potencialmente infeccioso, por lo que deberán evitarse procedimientos de riesgo poniendo todas las barreras físicas, químicas o biológicas disponibles para evitar el contacto. Las enfermedades más comunes producidas por agentes biológicos en el ámbito sanitario son hepatitis B, hepatitis C, sida o tuberculosis, mientras que en el caso de medicamentos peligrosos, los efectos más comunes a su exposición son daños en el ADN, cáncer, problemas de desarrollo y reproductivos.
Con la implementación de una guía de recomendaciones de actuación se pretende acercar la problemática de la prevención de los riesgos biológicos al personal técnico y promover que cada área del centro sanitario evalúe los riesgos asociados a la manipulación de los productos sanitarios para informar de los procedimientos a seguir en cada caso.