
“Da tu primer paso ahora. No es necesario que veas el camino completo… El resto irá apareciendo a medida que camines”
Martin Luther, Jr.
Cuan ciertas son estas palabras, para aquellos que empezaron este recorrido de Salud y Seguridad Ocupacional/Prevención de los Riesgos Laborales en Panamá, por medio de este escrito se pretende conocer la historia y transformaciones en estos 37 años; y como nos hemos ido sumando más panameños comprometidos con la SSO/PRL.
Desde los inicios de la República de Panamá las políticas sanitarias han sido orientadas hacia:
- La reparación y compensación del daño.
- La segmentación entre las condiciones de trabajo y el ambiente laboral y de su relación con la salud.
- La ambigüedad en el campo de la prevención de riesgos de trabajo (prevención de las lesiones, control de daños, control de pérdidas).
- La ausencia de un enfoque epidemiológico de la relación entre la condición de salud/enfermedad de los trabajadores y los procesos de trabajo.
- La dicotomía entre lo “ocupacional” y lo “no ocupacional” de la fuerza laboral.
Por tales razones en su evolución y desarrollo el estado panameño ha operado principalmente en el ámbito de las prestaciones relativas a la reparación del daño y la compensación económica. No es casual, que en el decreto con el sé que crea el Ministerio de Salud (MINSA), no existan referencias explicitas sobre la prevención y protección en los lugares de trabajo; lo cual se agrava aún más con el Estatuto Orgánico del MINSA, el cual hace mención de los mismos en forma muy superficialmente. Posteriormente, con el transcurrir del tiempo, al ser creado el Ministerio de Trabajo tampoco se contempla en forma explícita aportes en este campo; sin embargo, se dan avances parciales muy significativos al crearse la Ley Orgánica del Ministerio de Trabajo, ya que crea dos estructuras importantes como lo son el Departamento de Seguridad Ocupacional y el Consejo Nacional de Trabajo y Bienestar Social.
Aparecía la luz cuando la Caja de Seguro Social (CSS) a través del Decreto N°68 de 1970 incursiona en esta materia como institución Aseguradora de los Riesgos Profesionales, bajo un enfoque esencialmente reparador y de compensación del daño, reproduciendo los sistemas de gestión administrativa de riesgos que tipificó la intervención de los seguros privados. Para este año, se crea la estructura normativas en materia de SSO/PRL (Seguridad y Salud Ocupacional/ Prevención de Riesgos Laborales); con el paso de los años, la época de los años 1980, se le conoce como “La época de oro” de la SSO/PRL en Panamá, por recibir apoyo del gobierno de turno; sin embargo, a pesar de la promoción y de su rápido crecimiento, no estábamos preparados con personal idóneo y además que a nivel regional no existía centro de formación para ese personal; sin embargo, empiezan los primeros intentos de formación, y en aquel período predominaba la influencia de la Escuela Mexicana que fuera cambiante con el paso del tiempo con la llegada del internet, permitiendo acceso a otras corrientes como la española.
A finales de ese período traumático era inevitable la necesidad de expandir la red de servicios de prevención riesgos laborales, donde se asigna y se envían a colaboradores a expandir el área de cobertura bajo este lema: “Id y predicad el evangelio de la prevención”, dando así enormes pasos en el campo de la prevención panameña.
Se da un vuelco en los avances logrados, la razón de tal acontecimiento que podemos señalar son los profundos cambios que experimentamos como nación en general, la población trabajadora y SSO/PRL en particular, luego de la invasión estadounidenses en nuestro país.
A inicios de 1990 la nación bajo nuevas directrices y presiones externas vio perder las conquistas que en materia de SSO/PRL que a través de los años se habían logrado, estando entre ellas la estabilidad en el trabajo, además de la privatización de varias instituciones estatales, situación que conlleva hacia un acelerado desmejoramiento de las condiciones de salud y seguridad laboral; SSO/PRL no escapo a estos cambios, su ritmo de crecimiento se vio paulatinamente mermada hasta el punto de haber perdido casi por completo el liderazgo logrado en el campo de la prevención laboral, para esa época.
Bajo el pretexto de las altas pérdidas sufridas por el bloqueo económico y los saqueos durante la invasión armada, los empleadores tuvieron carta blanca para reducir personal, aglutinar tareas, extender las jornadas laborales, entre otras; como si fuera poco, de la impunidad que disfrutaban. En ese período la prevención era una fachada, debido a que se realizaban visitan a las empresas, se emitían informes y se entregaban con sus respectivas recomendaciones y la intervención hasta ese punto impactaba; puesto que los empresarios pasaban por alto las recomendaciones y responsabilidades laborales en materia de prevención. Todo se dejaba al estado. Ante esta situación, era obvio que se necesitaba nuevas estrategias de abordaje frente a los empresarios, quienes veían la SSO/PRL como una amenaza o ideas comunistas, ya que en muchos de los casos, el mejoramiento de las condiciones de los trabajador dependía de mejoras que requerían de algún tipo inversión económica por parte de la empresa.
Al principio por otro lado, todos los esfuerzos en materia de SSO/PRL estaba orientado al sector agrícola (bananero), con la intención de conocer las condiciones de salud y el trabajo de éste sector, por medio del análisis de la accidentabilidad laboral, el más alto en aquel tiempo a nivel nacional; así como también en el sector de la industria de la construcción, donde se publica la primera Guía Técnica de PRL en la industria de la Construcción en Panamá. La economía nacional da un giro, paradójicamente hay un proceso sostenido de crecimiento tecnológico que opera en forma desordenada y sin objetivos claramente definidos.
Desde su inicio, PRL se desarrolla fundamentalmente en el campo de la prevención, teniendo como objetivos específicos, la conservación de la Salud de los trabajadores y el mejoramiento de la calidad de los condiciones de trabajo. Una de las formas para contribuir al mejoramiento de la calidad de vida de los trabajadores es utilizando en forma eficiente los recursos, para garantizarles el acceso de toda la gama de servicios que se ofrecían.
La SSO/PRL no debe condicionarse a la prevención y control de las enfermedades y accidentes de trabajo; sino que debe considerarse de manera integral a la atención de la salud de los trabajadores dada la gran cantidad de enfermedades comunes que se agravan por influencia del trabajo y considerar al trabajador también fuera del contexto laboral (económico – social).
Como resultado de lo anterior, la vieja dicotomía entre lo “ocupacional” y “lo no ocupacional”, en materia de atención de los trabajadores ha sido sustituida por la integralidad de la intervención frente a los factores de riesgos derivados del ambiente, los estilos de vida y la organización del trabajo, con miras a la oportunidad de la fuerza – trabajo.
Los aspectos fundamentales que justifican la creación de un área estratégica SSO/PRL dentro del sistema de salud podemos resumirlos así:
- El concepto de Riesgos Profesionales esta restringidos al cotizante activo, con un enfoque de reparación y compensación del daño; dirigiendo sus acciones hacia la prevención del daño o lesión secundario a la exposición laboral. SSO/PRL trasciende la prestación económica y curativa para integrarse en la protección global de la población activa en mira a la optimización de la fuerza – trabajo como sustentación del estimulo a la productividad laboral; dirigiendo sus acciones hacia la prevención del riesgo a través del control de los factores de riesgo a que está expuesta la población laboral
- SSO/PRL parte de una globalización de los riesgos y factores de riesgos laborales. El concepto de riesgo profesional localiza la acción sobre el riesgo manifiesto.
En Panamá existe un marco jurídico constitucional que establece que las políticas de Medicina, Seguridad e Higiene en los lugares de trabajo, como parte estratégica de la responsabilidad en salud del estado.
A través de los años la SSO/PRL ha tomado mayor relevancia al ser contemplada dentro de la Ley Orgánica de CSS donde se contemplan aspectos de seguridad en el trabajo, además recientemente se aprueba el Reglamento General de Prevención de Riesgos Profesionales, todos los esfuerzos van encaminados en mejorar las condiciones y ambientes de trabajo.
Hoy se dan pasos agigantados para facilitar que la Gestión de los Riesgos Profesionales dentro de las empresas panameñas sea posible a través de la herramienta conocida como SISSO (Sistema Informático de Salud y Seguridad Ocupacional).
Siendo este un SISTEMA DE INFORMACIÓN DE DATOS que permite la gestión integral de la seguridad y salud en el trabajo, donde el empleador realizará la autogestión y ejecución de su Sistema de Prevención de Riesgos Laborales.
Por otro lado, desde inicio del año 2000 se formaliza la formación de carreras universitarias en suelo panameño, en Salud Ocupacional/ Prevención de Riesgos Laborales del personal responsable por velar el cumplimiento de las normativas panameñas en el campo de la prevención de los riesgos laborales y la vigilancia de las condiciones de seguridad, higiene y ambiente.
Cada día mejoramos y avanzamos en este campo que nos permite sentir grandes satisfacciones, por ser parte de quienes aportan un grano de arena en intentar alcanzar objetivos que en muchas oportunidades permitan mejorar la vida de muchos.
Emilia Millan
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