
La realización de trabajos de inspección, mantenimiento y reparación de vehículos requiere en numerosas ocasiones la utilización de fosos. El objeto principal de esta NTP es la seguridad de los trabajadores que los utilizan y la de los propios vehículos tanto al maniobrar para situarse como al salir de la zona perimetral. Para ello se describen las partes y características del foso, los riesgos y sus factores de riesgo y las medidas de prevención y protección correspondientes. Complementariamente se desarrollan otros aspectos tales como los EPI necesarios y la formación de los operarios.
Los fosos de inspección de vehículos son unas cavidades practicadas en la superficie del lugar de trabajo, normalmente son rectangulares y alargadas de una anchura adecuada para que permita a los vehículos situarse en su borde longitudinal con seguridad. Tienen una profundidad variable de hasta 2 m y disponen de una o dos escaleras de acceso situadas en uno o en ambos lados menores del foso o por un acceso lateral independiente.