El piloto de un helicóptero que realizaba tareas para instalar un árbol de Navidad en la región portuaria de Auckland, en Nueva Zelanda, resultó ileso tras protagonizar un espectacular accidente.
Todo iba según lo planificado, pero el aparato se enredó con unos cables de acero y terminó en el suelo. Por suerte no hubo heridos, sólo daños materiales y el aparato destrozado.
El piloto no sufrió heridas gracias al uso del cinturón de seguridad. y tú ¿utilizas el cinturón de seguridad?