
Los jefes tendrán prohibido llamar a cualquier hora a sus empleados en Alemania. Uno de cada cinco alemanes admite estar disponible durante su vida privada.
El gobierno alemán se propone poner fin a la cultura laboral de la total disponibilidad y prepara una ley anti-estrés para regular límites a la flexibilidad de los horarios laborales.
La patronal alemana toma este debate público poco más que como una excentricidad de un mercado laboral que disfruta de pleno empleo técnico en buena parte del territorio alemán y recuerda que la Ley de Protección de los Trabajadores de 1996 recoge ya una protección integral que previene los abusos de ese tipo.
El caso es que en Alemania, según una encuesta elaborada por la Iniciativa para la Salud y el Trabajo, dos tercios de los trabajadores hace habitualmente horas extraordinarias. Uno de cada cinco reconoce sentirse agobiado por las exigencias laborales. El 22% asegura estar disponible también durante actividades de su vida privada.
En un informe presentado ante el Ministerio de Trabajo, se afirma que “la pérdida de fronteras entre la vida laboral y la privada, la presión del tiempo y las reestructuraciones permanentes, tienen como resultado el incremento de enfermedades mentales, que son ahora la principal causad de jubilaciones anticipadas” en Alemania.
Fuente: El Mundo