
La firma está implementando dichas pruebas en las factorías alemanas de Ingolstadt y Neckarsulm, así como en Bruselas y en Györ (Hungría). Estos guantes permiten reducir en más del 50% el estrés por presión en diferentes actividades de producción.
La compañía tiene previsto introducir durante este año unos guantes especiales para las actividades industriales en serie. Audi apuntó que los trabajadores dedicados a la colocación de las puertas en los coches instalan unas 300 molduras por turno, con el consiguiente esfuerzo para sus muñecas y manos.
Para reducir la exigencia de estas zonas del cuerpo en las tareas de producción, la empresa ha desarrollado, junto con Spörer, unos guantes ortopédicos que reducen la presión y mantienen la sensibilidad y una movilidad total.
En la actualidad, un total de 1.000 trabajadores de la compañía de los cuatro aros están probando dichos guantes ortopédicos en las plantas de Ingolstadt, Neckarsulm, Bruselas y Györ, como parte del proyecto piloto, denominado ‘El lugar de trabajo del futuro’.